Da miedo ir al psiquiatra, ¿verdad? Incluso si te parece que lo necesitas, cuesta reconocerlo y decidirse a dar ese paso. Ahora bien, casi todos decimos alguna vez: "Estoy de psiquiatra ... ": o cotilleamos en privado, "ese/a está de psiquiatra ... ", pero no nos atrevemos a decírselo. Sin embargo las estadísticas no mienten: casi todos hemos estado, estamos o vamos a estar de psiquiatra. 

y no es tan malo, lo malo es no reconocerlo y, por ello, sufrir o hacer sufrir a los demás. Este libro puede sernos útil a todos, pero especialmente a los que, necesitándolo, no se atreven a pedir ayuda. Si lo lee sabrá si la necesita, o, si ya sabe que la necesita, se animará a consultar con su psiquiatra. Piense que, al fin y al cabo, no es más que un médico que sabe mejor que usted lo que le pasa a su cabeza.